(Anna and the Apocalypse,
John McPhail, 2018)
Y llegamos a un film sólo apto para menores
de 15 años. Sí, han leído bien, ya que esta producción inglesa es una comedia
de terror musical con mucho de Glee
(serie) o High School Musical (films
de Disney), con la acostumbrada pandemia zombi que se desata en un poblado.
Por lo que nos
encontraremos con unas bellas canciones pop que tratan sobre los problemas
adolescentes, y algunas escenas gore de mutilaciones y pérdidas de cabezas.
Cumple como un pasatiempo sin grandes
aspiraciones, con cierta comicidad y con la aceptable elección de un casting
poco conocido. Los únicos puntos en contra puedan ser la tardanza en que los
infectados aparezcan en escena y la liviandad general en la historia que nunca
alcanza a generar grandes emociones.
El resto es disfrutar o no de este ataque
zombi en plena navidad. Pero recuerde que es una producción demasiado
adolescente.
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