Candyman

 

(Candyman, Nia DaCosta, 2021)

Estamos en tiempos de cambio, pero esto es demasiado. En un punto me hizo acordar a Rocky 4 por la utilización política del film. Todos conocemos la problemática racial en USA, y si bien la original ya había tratado el tema, en este remake todo es tan grueso y arrojado al espectador como en aquel film de Stallone, y eso que los años pasaron.

No hay sorpresas en este reinicio de una posible saga, no hay terror, y sólo podemos destacar la fotografía y algunos momentos visuales en un film, que se va cayendo de a poco, ya que la trama y lo que sucederá se adivina a los 20 minutos. Lo mejor es como se cuenta la historia del personaje de la película original con siluetas recortadas contra la pared.

Un párrafo aparte la escena en que Candyman despacha a los más estúpidos policías blancos de toda la historia.

Olvidable.